En este post le mostraremos la forma más efectiva para mantener la madera de teca sin barnizar de su embarcación en perfectas condiciones y para que el mantenimiento de la misma sea más fácil la próxima vez.

En muchas ocasiones hemos paseado por el puerto, y nos hemos horrorizado de lo mal cuidadas que están algunas cubiertas de madera, normalmente las de teca, totalmente grisáceas, secas, quizás por falta de mantenimiento, dejadez o simplemente por no conocer cuáles son los pasos básicos para su cuidado.

Principales características:

La teca tiene un color castaño dorado, con un alto contenido en aceites y resinas naturales, que la mantiene constantemente hidratada, es altamente resistente y duradera, muy estable a los ambientes variables, resistente al agua, a la acción de los hongos y termitas, estas propiedades entre otras, son las que la convierten en la madera ideal para cubiertas.

Procedimiento:

Lo primero será observar en qué estado se encuentra, si está muy grisácea, deteriorada y el tacto es muy áspero, quizás tendremos que lijar un poco la superficie, lo podremos hacer manualmente o a máquina, un detalle muy importante, siempre en sentido de la veta y nunca haciendo círculos.

Seguidamente y siguiendo las instrucciones del fabricante aplicaremos sobre la teca humedecida en agua un limpiador o jabón neutro con la ayuda de una esponja, brocha, o similar, en tramos de unos 2 metros cuadrados, dejando actuar el producto normalmente máximo 5 minutos, después con un cepillo de dureza media frotaremos en sentido de la veta. Posteriormente enjuagaremos con abundante agua dulce, de forma que no quede ningún resto de producto.

El segundo paso es el de aplicar el abrillantador, como su propio nombre indica, su función es la de pulir, intensificando y mejorando el color, resaltando la veta. Lo aplicamos como hicimos antes con el limpiador, dejándolo actuar un máximo de cinco minutos y aclararemos con abundante agua dulce.

Hay personas que se saltan este paso, pensando en ahorrar dinero y trabajo, pero realmente, cuando se realiza, la teca queda verdaderamente espectacular.

Para terminar, una vez bien seca, protegeremos la madera con aceite de teca o sellador. El aceite penetrará en la madera, proporcionando una barrera frente a la humedad, manchas, suciedad. Este proceso se realiza con pincel, también en sentido de la veta, dejando que la madera absorba bien el aceite entre capa y capa, normalmente con una es suficiente, pero dependiendo de lo seca que esté o la capacidad de absorción que tenga, se le podría necesitar una segunda.

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